Toromocho, ubicado en los distritos de Morococha y Yauli, un yacimiento de pórfidos de cobre, es considerado como uno de los depósitos polimetálicos más importantes del Perú. Actualmente trabaja para ampliar su capacidad de procesamiento hasta las 170,000 tpd de mineral.
En un nuevo documento (una modificación de EIA que ahora está en evaluación) presentado a las autoridades competentes, en este caso el Senace, la minera de capitales chinos Chinalco solicita permiso para incluir entre sus nuevos componentes una chancadora primaria.
“Para incrementar la capacidad del chancado primario, se instalará una nueva chancadora a un costado de la chancadora actual”, indica en el amplio documento la empresa. Se trata, más específicamente, de una nueva chancadora giratoria cónica con una capacidad nominal de 148,200 tpd. Esta chancadora será accionada por un motor eléctrico de 750 kW, y la alimentará el material proveniente del tajo Toromocho. Los camiones descargarán directamente a la tolva de la chancadora.
La nueva chancadora primaria contará con un sistema de fajas transportadoras para enviar el mineral chancado a la faja transportadora principal.
Este sistema de fajas transportadoras estará conformado por una primera faja de transferencia de 2,4 m de ancho y 48 m de longitud, será accionada por un motor de 186 kW y tendrá una balanza para registrar el tonelaje de mineral chancado. La faja de transferencia descargará en una segunda faja de traspaso de 2,4 m de ancho y 371 m de longitud.
Finalmente, descargará el mineral chancado en la faja transportadora principal existente. Chinalco tiene planteado cargar este sistema de fajas a un 70% de su capacidad con la finalidad de evitar derrames durante el transporte.
Adicionalmente, planifica Chinalco incorporar dos nuevas chancadoras de piedras (pebbles), una en el circuito existente ( actualmente en operación) y una en el circuito de expansión. “Estas chancadoras serán alimentadas por el material de sobretamaño proveniente del molino SAG del circuito respectivo, y descargarán en el sistema de faja transportadora correspondiente, retornando al molino SAG”, explica la compañía.
Para poder procesar la mayor cantidad de mineral enviado desde la mina, el proyecto de ampliación incorporará siete celdas de flotación para la primera limpieza de cobre. Estas celdas serán de tipo tanque y con una capacidad nominal de 100 m3. Adicionalmente, agregarán cuatro celdas del tipo DFR en el circuito existente de flotación de limpieza de cobre, las cuales permitirán mejorar el grado de recuperación de cobre durante este proceso. Estas celdas serán de tipo tanque y de una capacidad nominal de 100 m3.
En el área de remolienda de cobre, instalarán dos equipos principales: un nido de hidrociclones (con 13 ciclones acomodados de forma radial) con una capacidad nominal de 614 m3 /h, y un molino vertical de remolienda de cobre.
Para la flotación en la segunda limpieza de cobre, el proyecto contempla incorporar seis celdas de flotación tipo DFR con una capacidad nominal de 100 m3. Finalmente, montarán siete celdas de flotación cleaner scavenger de tipo tanque y con una capacidad nominal de 100 m3 en el área de flotación.
De acuerdo con el nuevo plan de explotación del tajo y a una tasa de extracción de 170,000 tpd, la vida útil de Toromocho es de 24 años.
(Foto referencial)
Fuente: Revista Energiminas